XAVIER BATALLA
DOMINGO, 28 DICIEMBRE 2008
No es la solución
Los actos terroristas de Hamas, el movimiento islamista que controla Gaza, son repugnantes, aunque no son el origen del conflicto con Israel: son su consecuencia. El problema de fondo es un contencioso que, después de más de medio siglo de guerras, no tiene una solución militar, pese a la matanza provocada ayer por el ataque israelí contra Gaza.
Palestina y Cachemira son dos conflictos a los que sólo parece unirles el terrorismo. No es así. Cachemira, mayoritariamente musulmana, se integró en India en 1947, cuando la independencia, porque Nueva Delhi presionó en 1947 a su marajá, un hindú, para que no se uniera a Pakistán, país musulmán. Desde entonces, India acusa a Pakistán de patrocinar el terrorismo. Pero la cuestión es que el contencioso, como han demostrado las dos guerras libradas, no tiene una solución militar. En Palestina, los optimistas creyeron que después de la guerra fría había llegado la hora del entendimiento, basado en la resolución 242 de la ONU, que propone la retirada israelí de los territorios ocupados en la guerra de 1967. Fue un espejismo. Ariel Sharon aprovechó el 11 de septiembre para destruir la Autoridad Nacional Palestina, lo que benefició a Hamas. Pero la cuestión es que el conflicto, como han demostrado las seis guerras libradas, no tiene una solución militar.
Hace dos años, el ex presidente Felipe González se las tuvo en Sevilla con el entonces embajador de Israel, Víctor Harel, a propósito de Hamas. González afirmó: “ Hay que hablar con Hamas”. El embajador Harel mostró entonces su disgusto, y González replicó: “ Hamas fue en parte una iniciativa de Israel”. Para la Unión Europea, Hamas es una organización terrorista, pero, también según la Unión Europea, ganó limpiamente las elecciones palestinas del 2006. ¿Hay que negociar o no, entonces, con Hamas? ¿Hay que esperar a que el enemigo cambie para abrir un proceso negociador o hay que actuar con el convencimiento de que será el mismo proceso el que hará cambiar las posiciones del enemigo?
La sociedad internacional ha impuesto a Hamas tres condiciones: el reconocimiento de Israel, la renuncia a la violencia y el respeto de los acuerdos firmados entre palestinos e israelíes. Pero Hamas se alimenta de la conducta de Israel, que traza unilateralmente sus fronteras y amplía los asentamientos, extremo que no prevé la hoja de ruta del Cuarteto. Y los israelíes, con la exigencia de que el enemigo los reconozca, reconocen implícitamente que la negación es ya la última baza que le queda a Hamas. Tony Blair, representante del Cuarteto, reconoció el pasado marzo que es necesaria “ otra estrategia en Gaza”, porque el bloqueo para doblegar a Hamas no funciona. El problema de Israel es que el conflicto con los palestinos no tiene una solución militar. La matanza perpetrada en Gaza volverá a demostrarlo.
Artículo completo :LVG20081228 No es la solución